miércoles, 5 de agosto de 2009

QUIZÁS SOMOS MÁS IMPORTANTES...

Quizás somos más importantes de lo que creemos. Quizás lo que sucede en el reino de nuestra conciencia realmente tiene importancia en el esquema cósmico. Sabemos que no tiene mucha importancia lo que le sucede al cuerpo, pero si lo que sucede "en" y "a través" del cuerpo. Quizás lo que ocurre en el cuerpo y por medio de lo que llamamos planeta habitado también por Dios, es de vital importancia para los planes de Dios mismo. Esto daría sentido a la vida.-
Sólo cuando hemos captado y apreciado su significado podemos comprender la significación de la palabra emitida.-
Parafrasearemos el mensaje de los ángeles, el cuál fue emitido por un grupo de seres y dado a otro; por lo tanto es un mensaje mundial que aún espera respuesta.
"CUANDO LA CONCIENCIA CRÍSTICA SE HAYA DESPERTADO EN TODOS LOS HOMBRES, ENTONCES TENDREMOS PAZ EN LA TIERRA Y BUENA VOLUNTAD ENTRE LOS HOMBRES. CUANDO ESTO OCURRA, ENTONCES PODRÁ SER DIOS GLORIFICADO".-
La expresión de nuestra divinidad pondrá fin al odio reinante en la tierra y derribará los muros que separan a un hombre de otro, a un grupo de otro, a una nación de otra y a una religión de otra. Donde hay buena voluntad debe haber paz, actividad organizada y el reconocimiento del Plan de Dios; porque ese Plan es síntesis, es fusión, es unidad y unificación.-
Entonces, CRISTO, será él, Todo en todos y Dios padre será glorificado. Esto se efectuará por la viviente unión con Dios por medio del Cristo, el Cristo histórico que reveló a Dios, y mediante el Cristo individual, oculto en cada corazón humano que debe ser traído a la existencia.-
*Compenetrado por la idea de una unión viviente con Cristo, morando en ÉL. Estamos arraigados en ÉL, como lo está el árbol al suelo para mantenerse firme y dar fruto. Estamos construídos en ÉL, como los fuertes cimientos de un templo están asentados en la roca viva. Vivimos en ÉL, como los miembros del cuerpo... La morada es recíproca; ÉL está en nosotros y nosotros en ÉL. ÉL está en nosotros como fuente de nuestro ser, nosotros estamos en ÉL llenos de su plenitud. ÉL es en nosotros como la luz del sol, así como la cámara sin luz estaría a oscuras. Nosotros estamos en ÉL como leño verde que ha sido arrojado a la flamígera hoguera, resplandeciendo con rojizo y transformante calor. Él está en nosotros, todo comunicativo, nosotros estamos en ÉL todo receptivos. ÉL está en nosotros como la savia que circula en el árbol, nosotros en ÉL como las ramas*.-
CRISTO EN DIOS, DIOS EN CRISTO, CRISTO EN NOSOTROS