El poder de esta invocación es tremendamente grande, no sólo nos guiará en el Sendero de la Iluminación sino que también nos protegerá de las energías negativas de toda índole; es conveniente aprenderla de memoria y repetirla por lo menos cuatro veces al día o cuando estemos frente a un momento de angustia o tensión: a la mañana antes de levantarnos, al mediodía, al atardecer y a la noche cuando estemos acostados y antes de dormir.-
La Gran Invocación (personalizada)
Desde el Punto de Luz
en la Mente de Dios,
que afluya Luz sobre mi mente,
que la Luz descienda sobre mí.-
Desde el Punto de Amor
en el Corazón de Dios,
que afluya Amor sobre mi corazón,
que Cristo sea en mí.-
Desde el Centro donde la Verdad de Dios es conocida
que el Próposito guíe a mi pequeña voluntad,
el Propósito que el Maestro conoce y sirve.-
Desde el Centro que llamamos raza de los hombres
que se realice el Plan de Amor y de Luz,
y selle las puertas donde se halla el mal.-
Que la Luz, el Amor y el Poder restablezcan el Plan en la Tierra.-
Así sea. Le Olam. Amén
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario